8 motivos: ¿Por qué los jóvenes consumen drogas?

Son muchos los motivos y factores que explican por qué un joven consume drogas. Reflexionamos sobre los motivos más frecuentes para poder entender este hecho.

La heroína está considerada como una de las drogas más adictivas y destructivas.
La heroína está considerada como una de las drogas más adictivas y destructivas. | Imagen de: SCOTT GRIESSEL.

 

El consumo de drogas supone uno de los principales problemas sociales en una gran cantidad de países, tanto desarrollados como no desarrollados. En este artículo vamos a analizar los motivos que explican por qué los jóvenes consumen drogas.

El motivo de escribir un artículo sobre los jóvenes y no de las personas en general, viene impulsado por varios puntos que veremos antes de nada:

Los jóvenes consumen drogas ¿y qué?

Se sabe que las personas que han consumido drogas durante la juventud son  más propensas a consumir drogas años más tarde, en mayor o menor medida. Por supuesto, no hablamos solo de personas con problemas de adicción, sino también de personas que realizan consumos esporádicos y puntuales.

La relevancia de entender por qué los jóvenes consumen drogas reside en que, conociendo los motivos, se puede conseguir disminuir la cantidad de consumidores. Además, trabajar para la prevención del consumo en jóvenes es vital, incluso más que en personas adultas.

Esto último se debe a que los jóvenes que consumen drogas (frente a los adultos) reciben más daños físicos (principalmente neurológicos) por culpa de las drogas, ya que su sistema nervioso no está desarrollado del todo. Cuando el joven consumidor se convierte en adulto, los estragos de las drogas son mayores y las secuelas suelen ser ya irreversibles.

Por qué los jóvenes consumen drogas: 8 motivos

A continuación vamos a descubrir los motivos por los cuales los jóvenes consumen drogas y, en los peores casos, acaban haciéndose adictos a ellas. Por supuesto, siempre hay que entender cada caso de manera individual, pero estos motivos generales pueden ayudar a entender la mayoría de ellos.

1. Presión social

Lo cierto es que el dicho de “dime con quién andas y te diré quién eres”, es algo imperfecto. Lo que sí está demostrado es “dime con quién andas y te diré qué haces”.

Así es,  los comportamientos de nuestros amigos y compañeros nos influyen, incluyendo el consumo de drogas. Tener amigos que suelen consumir drogas aumenta las probabilidades de acabar probandolas.

Otros factores pueden hacer que probar una droga una vez, se convierta en un hábito.

2. Desconocimiento de las consecuencias

Si bien es cierto que se invierten muchos esfuerzos en evitar que los jóvenes consuman drogas avisando de los efecto negativos, existen drogas que podríamos llamar “confusas”.

Los ejemplos más claros son el tabaco y el alcohol. En ambos casos, todo el mundo sabe (incluso los jóvenes) que el consumo de estas dos drogas es perjudicial para la salud, pero, ¿por qué casi todas las personas consumen una u otra (o ambas)? Esto acaba haciendo que la droga se vea como menos dañina.

Por otro lado, existen drogas que se consumen porque se perciben como más inofensivas, como pueden ser los medicamentos que recetan los médicos (que en ocasiones son incluso más adictivas) o drogas de diseño que acaban de salir al mercado.

3. Malestar y sufrimiento

Cuando una persona, ya sea joven o no, lleva mucho tiempo sufriendo y sintiendo malestar, las drogas se anuncian como una forma de inclinar la balanza en el sentido opuesto.

Los seres humanos necesitamos sentir algo de placer cada poco (o mucho) tiempo para poder seguir haciendo frente a la vida. Si el sufrimiento nos inunda durante mucho tiempo, intentaremos encontrar algo de placer, aunque sea “por la vía rápida”, es decir, usando drogas.

Debemos hacer hincapié en que el malestar que impulsa a una persona a consumir drogas (para dejar de sentirlo) puede provenir de múltiples fuentes. Algunas pueden ser:

  • Problemas familiares.
  • Bullying.
  • Baja autoestima.
  • Ausencia de sentido vital.
  • Fracasos amorosos.
  • No integración en grupos sociales.
  • Fracaso escolar.
  • Fallecimiento de alguien cercano.
  • Abusos sexuales.

4. Aumento del rendimiento

Cuando hablamos de jóvenes consumiendo drogas nos olvidamos de un gran sector de estos.

Para entender realmente por qué los jóvenes consumen drogas no debemos olvidar que muchos lo hacen (sobre todo en edades más tardías, como en la universidad o en edad de hacer post-grados)  para rendir más académicamente.

En países como Estados Unidos o Inglaterra donde la competitividad por entrar (y permanecer) en las mejores universidades está a la orden del día, sacar las mejores notas puede ser solo accesible para las mentes más brillantes. Si esto no se acepta y no se es capaz de alcanzar lo más alto por sí mismo, más de un joven acaba consumiendo sustancias como las anfetaminas  para rendir más.

5. Curiosidad

Suena a tópico, pero este es uno de los principales motivos que explican por qué los jóvenes consumen drogas.

Y no es de extrañar, ya que la curiosidad es intrínseca a la juventud y está explicada neuroquímica y evolutivamente. El problema es que, cuando esta curiosidad no es frenada por la información sobre los peligros de las drogas, muchos se acaban arrepintiendo demasiado tarde.

6. Rebeldía

Es un caso similar al anteriormente mencionado de la curiosidad. La juventud (en especial la pubertad), como fase natural en el desarrollo de un ser humano, ha evolucionado hasta lo que es hoy en día  para servir al joven como “independizador” de sus padres. Sus ansias de libertad, descubrimiento e independencia parental le hacen adoptar ese rol tan conocido como es el de la rebeldía.

El problema es que esta rebeldía puede acabar explicando el por qué del consumo de drogas en los jóvenes. Bastará que una figura de autoridad le diga que no debe probar una sustancia, para que el joven rebelde lo haga. Tan peligroso como natural es este proceso.

7. Diferencias neurológicas

Se ha visto que no todas las personas reaccionamos de la misma forma ante una misma sustancia psicoactiva. De hecho, cada persona es distinta a la anterior.

Se conoce desde hace tiempo, que existen dos grupos relativamente diferenciados en la población. En esto grupos encontramos dos tipos de personas, unas que sienten más refuerzo (placer) al consumir drogas, que otras.

El placer puede venir no solo del compuesto químico en sí, sino de todas las demás repercusiones que hemos hablado, como puede ser evadirse de otros dolores o del placer que se siente al explorar nuevas sensaciones en nuestros cuerpos. Esto puede hacer que una persona ante un mismo tipo de droga, sienta después de su primera toma más ganas de repetir que otra persona.

Dichas diferencias neurológicas se explican por una cantidad muy elevada de variables genéticas y neurológicas, que a día de hoy siguen, en su mayoría, siendo un misterio.

8. Socialización

Muchos jóvenes introvertidos tienen serios problemas para socializar con el resto de iguales. Esto puede suponer un problema grave tanto a corto como a largo plazo. Si además de esto, el joven es consciente de ello, tal vez busque formas de solucionar su falta de socialización.

Una forma común es el uso de alcohol, que permite desinhibirse y mostrar la versión más sociable de uno mismo.

En los peores casos, el consumo de alcohol se puede volver crónico o puede convertirse en una condición sine qua non para relacionarse con los demás. En otros, el consumo de alcohol puede dar paso a otras sustancias más agresivas como la cocaína.