‘Mindhunter’ acaba de estrenar su temporada 2 en el catálogo del gigante del streaming de la N roja. La crítica parece haberla dado un recibimiento superior al de su primera temporada, que ya prometía que estábamos ante una serie potente.
Parece que el equipo de Joe Penhall está trabajando ya en las mentes criminales a abordar en su temporada 3, así que procederemos a dar un repaso genérico de quiénes serán los candidatos a ser analizados más adelante.
Uno a uno y por orden alfabético
Los primeros serán los primos Bianchi y Buono, o más conocidos popularmente como ‘Los estranguladores de la colina’, asesinaron a diez personas a lo largo de cuatro meses entre 1977 y 1978. Ambos estaban interesados en prostitutas, hasta que comenzaron también a ir a por mujeres corrientes, para secuestrarlas, violarlas y asesinarlas. ¿Su firma? Dejar los cadáveres en las colinas periféricas de Los Ángeles.
Ted Bundy es el segundo de nuestra lista. Nadie jamás creyó que detrás de la fachada de aplicado y bien parecido estudiante de Derecho, se hallaba uno de los asesinos más despiadados y retorcidos de la historia reciente de los Estados Unidos. Acabó con la vida de, hasta la fecha, de 30 mujeres, a las que violó, golpeó, torturó, a veces decapitándolas y llegando a practicar la necrofilia con sus cadáveres.
En el tercer puesto de la lista de posibles en la temporada 3 de la serie de Netflix, está Robert Hansen. Fue apodado como “El panadero carnicero”, por el ejercicio de la primera profesión, la segunda parte del apodo seguramente que se hagan una de de por qué le viene. Hansen solía secuestrar prostitutas a las que después llevaba a una cabaña para torturarlas y darlas caza como animales: asesinó a 17 mujeres entre 1977 y 1983.
El cuarto se trata ni más ni menos que del segundo asesino en serie más masivo de la historia del país. Gary Ridgway, pagaba a prostitutas a las que indicaba que quería tener sexo con ellas, para secuestrarlas y estrangularas. Habitualmente regresaba al lugar donde estaban los cadáveres para practicar la necrofilia; asesinó a 61 mujeres.
El quinto y último es el abominable John Wayne Gacy, conocido como ‘El payaso asesino’ y que tuvo un film en 2003. El caso de Wayne es otro de los más perturbadores de los expuestos con anterioridad: modélico padre de familia, pero de dura infancia, maltratado física y psicológicamente por un padre alcohólico; al parecer Gacy pasó desapercibido como exitoso vendedor y hombre comprometido con la comunidad.
Creó un personaje, el payaso Pogo, con el que se ofrecía para fiestas de cumpleaños, para después incitar a jóvenes adultos a ir a su hogar a tomar drogas y tener sexo, para posteriormente violarlos y estrangularlos. Gacy los enterraba en el sótano de su casa: la policía halló 26 cuerpos de los 33 asesinatos que cometió.
Alabada por su verismo y rigor
Netflix puede haber conseguido con ‘Mindhunter’ el nuevo producto estrella que su catálogo pedía a gritos desde hacía tiempo. El rigor de cada caso, así como lo conciso y analítico del guión, hacen de la serie un producto difícilmente resistible.
No porque además se rompa con la aparente lógica de investigación típica de‘Crímenes Imperfectos’ (1996-2011), sino porque a pesar de ser ficción, el retrato de las mentes criminales a abordar es tan detallado, y el trabajo de los intérpretes tan elaborado, que pisa sobre el terreno del cinema verité.