Siempre hay historias de la industria de Hollywood que pueden dar incluso para un documental o una película a parte, porque algunas son tan absurdas como increíbles de pensar, ¿qué hizo tal actor o actriz para conseguir que un estudio le diera un papel? ¿Cómo enfrentó a un director para que consiguiera hacerle ver que era la persona idónea para un papel? Bueno, pues digamos que algo así es lo le pasó a Robert Downey Jr. (‘El juez’), y menuda historia.
2006: Marvel Studios busca a Tony Stark
El estudio por aquel entonces iba a iniciar el desarrollo de su fase 3, y deseaban iniciar una nueva tandas de películas de superhéroes para poder mezclarlos a todos y conformar el equipo de superhéroes más poderosos de la Tierra, así es, Los Vengadores, un hito histórico jamás llevado a cabo por nadie en la industria.
Pero para ello, necesitaban primero vender a uno de los superhéroes menos conocidos por el gran público, como lo era Iron Man, que a pesar de que había tenido varias series animadas en 1966 y 1994, el personaje no se había vendido lo suficientemente bien, como para tener la popularidad de Spider-Man o de Hulk.
Jon Favreau (‘Chef’) ya había sido seleccionado como director para narrar los orígenes de Iron Man, y que contaba con un equipo de cuatro guionistas, que habían conseguido encontrar un marcado tono adulto, pero también desenfadado, sin alegarse de la marca Marvel para presentar a este superhéroe: teniendo en cuenta el impacto de ‘El caballero oscuro’, de Nolan, que en aquel momento había elevado a DC Comics a límites inimaginables.
Favreau tenía claro quién debía ser Tony Stark, Marvel Studios también; pero no eran el mismo actor. Mientras que Favreau quería a Downey Jr., el estudio deseaba a Tom Cruise para enfundarse el Mark 42. ¿Alucinante verdad?
La prueba que lo cambió todo
Favreau no estaba para nada de acuerdo en la decisión que pretendía tomar el Estudio, si bien era cierto que Cruise podía dar el perfil, le faltaba el suficiente descaro y sarcasmo que Downey Jr. podía conferirle al personaje; y es que al final Downey Jr. compartía más similitudes con Tony Stark en la vida real, de lo que la gente creía.
El problema era que Marvel Studios quería ir a lo seguro, y allá por 2006 Downey Jr. acababa de rehabilitarse hacía solo unos años de su adicción a la heroína, y aunque había destacado en algunas notables películas independientes como‘Memorias de Queens’, de Dito Montiel o ‘A Scanner Darkly’, de Richard Linklater; a Marvel no le terminaba de convencer.
Favreau tomó una drástica decisión junto con la Directora de Casting, Sarah Halley Flynn, grabaron una muy breve prueba en la que Downey Jr. interpretaría a Tony Stark. El estudio finalmente tuvo que darle la razón a Favreau, y lo demás es historia.
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