Saber de antemano las partes de un proyecto es de suma importancia para su éxito. De hecho, cuanto mejor cimentado esté el proyecto, más exactos y coherentes serán los resultados (aunque no sean los esperados). En las siguientes líneas presentamos todas y cada una de las fases principales, ya sea de investigación o un proyecto por escrito.
Hablar de las fases de un proyecto implica, en muchos casos, conocer su estructura. Dicha estructura nos servirá de guía para no desviarnos de la temática principal o priorizar aquellas partes que queremos tratar en más profundidad. En cualquier caso, algunas de las partes implican conocer y detectar los recursos que tenemos a nuestro alcance para desarrollar el contenido.
CONTENIDO DEL ARTÍCULO
1. Partes de un proyecto de investigación.
2. Partes de un proyecto empresarial.
3. Partes de un proyecto escolar.
Antes de desarrollar un proyecto de investigación debemos conocer su naturaleza o tipología. Para obtener más información, puedes consultar los tipos de investigación que existen.
En esta primera parte establecemos una serie de bases para el proyecto.
Se trata de resumir, en pocas palabras, la naturaleza de la investigación. Una síntesis muy breve de la problemática que se va a tratar. Esta idea debe estar presente a lo largo de todo el proyecto.
El título de la investigación surge de la idea. Debe ser claro para expresar la naturaleza de la investigación.
Breve descripción del tema de la investigación. También debe ser clara para que el lector identifique la problemática del proyecto.
En este apartado desarrollaremos la problemática a tratar, sus características y factores a tener en cuenta durante la investigación.
Aquí detallamos todos y cada uno de los objetivos generales y específicos que se esperan obtener con el proyecto de investigación. Se deben proponer objetivos realistas teniendo en cuenta las limitaciones, otra de las partes que exponemos más adelante.
En esta parte explicamos cuál es la razón que nos lleva a desarrollar el proyecto, aquello que suscita el interés del responsable del proyecto.
Para cerrar esta parte, listamos las limitaciones del proyecto. Los objetivos pueden variar en función de estas limitaciones.
En esta parte del proyecto se fundamenta el grueso de la investigación. Va más allá del planteamiento de la misma, tratando los siguientes puntos.
Aquí detallamos qué investigaciones se han hecho sobre la misma temática, que resultados se han obtenido y qué información nos puede ser útil para desarrollar el proyecto. Podemos centrarnos en investigaciones similares y establecer algunas semejanzas.
Esta es una de las partes más trascendentales del proyecto. Una hipótesis es una “suposición hecha a partir de datos que sirve como base para iniciar una investigación”. Por lo tanto, tratamos de dar una posible respuesta a la problemática, fundamentando nuestra afirmación en los resultados del proyecto.
Es, en cierto modo, el desarrollo del proyecto de investigación. Consiste en una serie de acciones que nos permitirá obtener un resultado o conclusión. Consta de cuatro partes:
Definir qué instrumentos o mecanismos hemos utilizado para obtener datos.
Cómo hemos aplicado dichos instrumentos.
Cómo hemos analizado la información obtenido.
Qué resultados hemos obtenido.
La culminación de la investigación. En este apartado, haremos un breve resumen de los resultados obtenidos mediantes las acciones previas. En esta síntesis, compararemos los resultados con los objetivos específicos y generales que esperábamos cumplir.
Hablamos de proyecto empresarial si el objetivo del proyecto es generar un beneficio para la empresa (sea del tipo que sea) y no el conocimiento o la respuesta a una problemática. Hay cambios significativos respecto a un proyecto de investigación, de modo que la estructura queda de la siguiente manera.
En cualquier tipo de proyecto se deben establecer unos objetivos. Existe un objetivo general y unos objetivos específicos. Todas las acciones que llevamos a cabo están orientadas a cumplir estos objetivos, así que deben ser claros y realistas.
A continuación, detallamos qué plazo tenemos para culminar el proyecto (deadline). La calendarización tiene un carácter maleable, ya que existen una serie de factores externos que pueden modificar el plazo.
Primero debemos conocer la cantidad exacta de recursos económicos que podemos destinar al proyecto. Seguidamente listamos todas y cada una de las partidas presupuestarias, añadiendo una partida destinada a cubrir gastos imprevistos.
En esta parte añadimos los recursos que no sean de tipo económico. ¿Disponemos de los recursos necesarios? ¿Qué limitaciones tiene la empresa para cumplir los objetivos? Estas preguntas deben ser resueltas en este apartado.
Teniendo en cuenta los puntos anteriores, establecemos las tareas y subtareas que debemos llevar a cabo para el correcto desarrollo del proyecto. Después asignamos cada una de las tareas al equipo de trabajo (o miembros del equipo) que corresponda, de forma que la carga de trabajo sea razonable.
Por último, debemos dejar constancia de a quién o a qué va dirigido el proyecto empresarial. Puede tratarse de un cliente, un departamento interno de la empresa o un público concreto. Les destinatarios también son llamados dueños del proyecto.
Por último, definimos las diferentes etapas de un proyecto escolar. El documento resultante sentará las bases de la institución, aunque podrá ser revisado y modificado en cualquier momento. Debemos destacar que un buen proyecto escolar deberá cumplir una serie de requisitos, como ser participativo y promover la integración de los docentes y el alumnado.
En primer lugar, debemos identificar cuál es la relación del centro educativo con su entorno. ¿Cómo es la población del entorno? ¿Qué se espera del centro? ¿Qué opinión o imagen puede tener el centro en la actualidad? Se deben tener en cuenta aspectos sociales, urbanísticos, demográficos y culturales.
De igual manera, debemos exponer los aspectos que otorgan identidad al centro. Esto se traduce en los valores y principios de la institución y algunos rasgos diferenciadores como la innovación tecnológica o la inclusión social, por citar algunos ejemplos.
El documento debe exponer también los objetivos que el centro educativo espera cumplir. Los objetivos deben ser coherentes y en consonancia con los valores y principios que antes hemos mencionado.
Ninguno de los objetivos se puede cumplir si no existe una oferta educativa que resulte lo suficientemente atractiva. Sobra decir que la oferta debe cumplir unos mínimos de calidad. En esta fase del proyecto también se deben detallar las pautas y métodos de los docentes y profesionales del centro.
Por último, definiremos el organigrama del centro escolar. Explicaremos qué relación existe entre los profesionales y docentes y los mecanismos de interacción y comunicación de los que pueden hacer uso.