La lengua española es muy rica en su vocabulario, lo que permite incluso insultar a alguien con propiedad, de manera que no caigamos en la chabacanería más vulgar, a la vez que nos desahogamos.
Insultar a alguien cuando discutimos acaloradamente o maldecir al aire son recursos que utilizamos para sobrellevar la tensión de algunos temas de conversación, así que te traemos 15 palabras para que insultes con propiedad y que contribuirán a que quedes de forma elegante.
Las siguientes palabras para insultar son un compendio de términos recogidos en tres diferentes diccionarios: el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, el Diccionario Etimológico Joan Corominas y el de la Academia Mexicana de la Lengua, donde se encuentran expresiones conocidas como “mexicanismos”.
Hemos ordenado estos insultos refinados en orden alfabético para que sea más fácil seguir la lista:
1. Abombado
Comenzamos con un término que no hace referencia únicamente a la forma de un objeto, sino que es además una palabra para insultar elegantemente a alguien especialmente ingenuo, que parece no entender cuando se le habla o que, directamente, no atiende a razones.
“¿Cómo puedes creerte esa mentira? ¡No seas abombado!”.
Igualmente, existe una acepción que puede servir para describir a alguien que está aburrido.
“Estuvo todo el día abombado, sin molestarse en socializar con la gente que había venido".
La palabra “abombado” suele utilizarse también en países como Argentina, Costa Rica, Nicaragua, República Dominicana o Uruguay, de modo que si vas por allí y se da el caso, puedas emplearla.
2. Alimaña
Esta palabra femenina se usa para referirse a una persona de gran bajeza moral, que no tenga sentimientos o de mal corazón.
“Es una alimaña, no le importa pisotear a los demás si así va a salir beneficiado".
3. Bellaco
“Bellaco” hace referencia a una persona con malas ideas y especialmente retorcida, de modo que es una buena palabra para insultar sutilmente.
“Era un bellaco sin escrúpulos que se dedicaba a atracar a ancianas tirándoles del bolso.”
4. Casquivano
Si quieres emplear una palabra para insultar como“casquivano”, estarás diciendo que es una persona que no es nada seria ni formal en sus encuentros sexuales.
“Un casquivano es aquel que se acuesta con cualquiera".
5. Crápula
Este término despectivo sirve para referirse a un hombre (así lo especifica el DRAE) desvergonzado, que no le importa lo que opinen de él.
“Menudo crápula: nunca ha dado un palo al agua".
6. Durañón
¿A qué te suena que alguien sea “durañón”? Ni más ni menos que una persona tacaña, de esas a las que les cuesta dar pero que puede no tener reparos en pedir.
“No me seas durañón, anda. Déjame dinero para el café, por favor".
7. Facineroso
Originariamente, un facineroso era un delincuente que llevaba tiempo dedicándose al crimen. Con el tiempo, pasó a ser una palabra para insultar de forma original, para mencionar a una persona malvada.
“Pablo Escobar era un facineroso".
8. Fantoche
Si eres una persona vestida de cualquier manera, o de forma pintoresca; o bien te maquillas de una forma muy llamativa, puede que te acusen de “fantoche”.
“¿Has visto cómo fue a la fiesta? Con ese modelo parecía un fantoche".
No obstante, una persona excesivamente presumida y sin motivos para serlo, también es un “fantoche”.
“Siempre alardeaba de cuántas chicas se había ligado y luego resultó que era todo mentira, ¡menudo fantoche!”.
9. Haragán
Una palabra ideal para insultar con gracia a los que les cuesta salir de la cama por las mañanas o ponerse a trabajar, es “haragán”.
“¡Despierta ya, no seas haragán, o vas a llegar tarde!”.
10. Mangurrián
En este caso, se trata de alguien poco civilizado, de costumbres provincianas.
“El muy mangurrián masticaba con la boca abierta".
11. Mastuerzo
“Mastuerzo” es una palabra para insultar de forma sutil a quien sea un incauto, una persona ignorante y sin criterio.
“El problema de esta sociedad es que hay demasiado mastuerzo con derecho a voto”.
12. Meapilas
En este caso, estamos ante un insulto refinado para designar las cualidades exageradamente devotas de una persona creyente. De la misma forma, puede llamarse “meapilas” a quien, de manera hipócrita, finge ser una persona de fe.
“El muy meapilas quería casarse por la Iglesia sin haber pisado una en su vida”.
13. Obtuso
Dícese de la persona corta de entendederas, a quien hace falta explicar las cosas una y otra vez para que las entienda.
Ejemplo: “Si no entiendes esta explicación es que eres más obtuso de lo que creía”.
14. Rompegalas
Similar a “fantoche”, un “rompegalas” es esa persona mal vestida, aunque de apariencia sucia o desaliñada.
“Con esos agujeros en el pantalón estás hecho todo un rompegalas”.
15. Zascandil
Terminamos esta lista de palabras para insultar con propiedad con esta, genial para hablar de personas estafadoras, sibilinas y manipuladoras.
“El zascandil este siempre trata de convencernos para salir de fiesta aunque haya que trabajar al día siguiente".