El uso de trabalenguas cortos es un método que favorecerá la pronunciación de los más pequeños, cuando éstos comiencen a ampliar su vocabulario o presenten ciertas dificultades en la articulación de las palabras.
Cualquier niño puede practicar y perder la vergüenza recitando los trabalenguas cortos de diferente dificultad que conforman nuestro artículo de hoy. Una buena alternativa a acudir al logopeda, sin duda alguna.
Afrontar los problemas de dicción y mejorar la fluidez es posible practicando cualquiera de los siguientes trabalenguas cortos.
¿Qué mejor forma de comenzar que con todo un clásico de los trabalenguas cortos que nos enseñaron en la escuela?
Con el agujero de la capa de ozono lo raro es que el cielo no se nos haya caído ya encima.
Un excelente trabalenguas para practicar el dígrafo de la /ll/.
No tiene por qué tener ningún sentido, la cuestión es que sirva para practicar la pronunciación.
Como le decía Fred a George Weasley en Harry Potter y el Cáliz de Fuego: “intenta decirlo 5 veces y cada vez más rápido”.
A estas alturas de la película, todavía hay quien confunde el pretérito perfecto simple “tuvo” (del verbo ‘tener’), con “tubo”, una pieza cilíndrica.
Paco es el protagonista de este trabalenguas corto. Nos quedamos con la intriga de para qué quería tantas copas.
No sabemos quién ideó este trabalenguas para niños, pero si quería complicarlo, podría haber metido un “calvito” por ahí en medio, para complicar aún más la cosa.
Claro como el agua cristalina, ¿verdad?
Ya pensaba que era un chiste, ¡qué decepción!
La auténtica locura está en intentar recitar estos trabalenguas cortos difíciles a la primera.
¡Cuidado Sansón, que los problemas derivados del consumo excesivo de sal son muy graves!
¿Y qué ocurrirá con los hipoglúcidos del hipopótamo Hipo después de su dieta hipocalórica?
Que alguien le diga a Pancha que antes de planchar tiene que frotar bien para quitar la mancha.
“Pepe pecas pipa pacas…” ay, me he equivocado. A ver otra vez: “Peque pepas pica pipas…” Nada, ¡que no hay manera!
¿Alguien voluntario para recitar alguno de estos trabalenguas difíciles por nosotros?
Como le detenga la policía de aduanas, Paquito va a tener que dar muchas explicaciones sobre lo que contienen esos paquetes...
Muchos trabalenguas siguen una estructura similar, pues no importa tanto su lírica como su cometido: ayudar en la pronunciación o bien a ganar apuestas.
El sonido de la /rr/ es uno de los que más cuesta pronunciar a los más pequeños. Enséñales cómo superar este problema de dicción mediante trabalenguas cortos como este, que le permitan practicar.
Nutritiva fruta el coco, poca duda cabe.
Pero, ¿quién dijo qué? ¡Qué lío con los participios!
Eres lo que comes y cómo comes, según este trabalenguas para niños.
¿Recuerdas a Paco, el que había comprado tantas copas y no sabíamos por qué? Pues está bien, de hecho todavía conserva muchas de ellas en su colección favorita.
Para practicar con este trabalenguas corto, deberás pronunciar correctamente el sonido de /ll/ y de la /y/.
O sea, que cuidado con qué pisos pisas.
Por lo visto, Pedro Picapiedra hacía horas extra en la cantera como maestro picapedrero. ¡Normal que luego llegase a casa y se encontrase la puerta cerrada! Wilma estaría cansada de esperarle hasta altas horas de la noche...
Algunos trabalenguas cortos hacen más fácil su comprensión y recuerdo haciendo que rimen.
Premio para quien le encuentre el sentido a este trabalenguas para niños de lo más enrevesado.
Los animales también pueden protagonizar trabalenguas cortos difíciles, que ni los más mayores serán capaces de recitar a la primera.