Cinco señales para detectar una relación tóxica. | Imagen de: Pxhere. Ni contigo ni sin ti. Una relación de pareja puede ser lo más bonito del mundo o un auténtico infierno. Antes de que te veas envuelto en una relación tóxica, os presentamos las señales más comunes y algunos consejos para salir indemne. Te puede ayudar: 20 frases de celos (y de relaciones tóxicas). ¿Qué es una relación tóxica? Una relación tóxica no tiene una definición clara, aunque a grandes rasgos podríamos decir que es toda aquella relación que aporta más aspectos negativos que positivos. Con frecuencia, se crea un vínculo de necesidad que puede resultar perjudicial para quienes están implicados en ella. Esto no quiere decir que en una relación tóxica no exista el amor o la amistad. Dos personas (o más) se pueden apreciar mucho o tener una enorme química sentimental y sexual, y sin embargo mantener actitudes totalmente impropias por causas que tampoco son fáciles de determinar. Cómo saber si una relación es tóxica en 4 señales Es habitual que una pareja no sepa (o no quiera admitir) que está atrapada en una relación de este tipo. Por ese motivo, recogemos una serie de señales que indican que las cosas no van del todo bien. Puedes contar todas las señales con las que te sientes identificado o identificada, a modo de test, y dependiendo del resultado sabrás si necesitas un cambio en tu relación de amigos o de pareja. 1. Control excesivo Una de las señales más comunes de una relación tóxica es que estás perdiendo el control de tu vida y cada vez eres más dependiente de las decisiones de la otra persona. Él o ella está al corriente de tus gastos personales, de tus publicaciones en redes sociales, de tu teléfono móvil, de tu agenda, de tus facturas y de otras tantas cosas que deberían estar bajo tu control. 2. Chantaje El chantaje y la manipulación emocional son otras dos constantes en una relación tóxica, no solo sentimental, sino entre los amigos y la familia. Para llevar a cabo este chantaje, el manipulador utiliza una serie de técnicas como el silencio, el autocastigo (“si me dejas, me tiraré por el balcón”) o el victimismo. Otra de las señales es que recurre con frecuencia a situaciones del pasado que ya creías olvidadas. 3. Menosprecio Si te compara con parejas del pasado, te contesta de malos modos siempre que expresas tu opinión sobre algún tema, critica tu forma de vestir o resalta cualquier aspecto físico con el que te sientes incómodo o incómoda, necesitas un cambio urgente en la relación. De lo contrario, podrías llegar a sufrir secuelas psicológicas importantes. 4. Mala comunicación Como veremos más adelante, una relación tóxica puede estar basada en la mentira o la omisión de información. La pérdida de confianza en el otro hace que la comunicación no sea fluida y que surja la desconfianza. Otra característica de las relaciones tóxicas es la pérdida de empatía. Si has dejado de contarle tus problemas porque los infravalora o te sientes en la obligación de poner remedio a los suyos es porque hay una mala comunicación. Todo el mundo necesita expresar sus sentimientos de vez en cuando. 5 tipos de relaciones tóxicas Hay muchas situaciones que nos pueden llevar a pasarlo mal en nuestra relación sentimental. Algunas de ellas son las siguientes. 1. El otro idealizado Dicen que el amor es ciego, y no hay mejor ejemplo que cuando una persona idealiza a la otra, pasando por alto aspectos importantes sobre su personalidad. Esas personas están en la búsqueda constante de una versión idealizada de su pareja y, cuando se dan de bruces con la realidad y sienten que su pareja no será capaz de ser como ellos quieren, surge la frustración. 2. La relación idealizada Se puede idealizar a una persona y lo mismo ocurre con las relaciones. Por norma general, la causa principal es una mala comunicación en las etapas iniciales y puede dar lugar a una relación tóxica. Los tipos de relaciones tóxicas más comunes. | Imagen de: Pxhere. No hay un manual para la pareja perfecta y cada uno tiene puede tener unas expectativas diferentes sobre la relación. Un ejemplo claro es cuando uno de los implicados da por hecho que la otra persona irá a vivir con él o ella tras unos meses de relación. Los estereotipos sociales y lo que “se supone que está bien” hacen mella y transforman la relación en tóxica. 3. Relación basada en la mentira Una de las cosas que nos impide cortar por lo sano en cuanto detectamos que una relación es tóxica es que vemos a nuestra pareja como un medio de vida, alguien con quien tenemos en común ciertos recursos y lazos afectivos, pero que no nos hace felices. Entonces la relación empieza a ser una soberana mentira. 4. Relación basada en el miedo Es imposible obligar a alguien a establecer lazos afectivos. El peor de los casos es cuando una persona utiliza la violencia, el miedo y el chantaje como herramientas para mantener una relación. En ese caso, debes informar inmediatamente a las autoridades para que pongan cartas en el asunto. 5. Relación jerarquizada Esto se produce cuando uno de los dos cede todo el poder de decisión y se deja llevar por la dinámica de pareja. Puede que al principio eso no resulte un problema, pero puede que la otra se canse de tomar la iniciativa o, lo que es peor, se acostumbre y abuse de su autoridad. Tal como señalan algunos psicólogos, esta jerarquización no está justificada, ya que el cometido de la pareja no es formar un “equipo centrado en un objetivo”. ¿Cómo salir de una relación tóxica? No es fácil saber si estás en una relación tóxica, y aún menos poner solución a esta desagradable situación. Sin embargo, te presentamos una serie de consejos que, sin ser la panacea, te ayudarán a salir indemne. 1. Tomar conciencia Lo primero que debemos hacer es tomar conciencia y considerar si la relación nos está aportando algo positivo o si, por el contrario, nos produce situaciones de estrés y baja autoestima. Aún en el caso de que siga habiendo amor y lazos afectivos, puede que lo mejor sea poner distancia de por medio. También podemos hablar con alguien de confianza, alguien que tenga una visión externa de la situación y te diga lo que piensa con neutralidad y claridad. 2. Poner distancia emocional Una manera de poner tierra de por medio es repetir un mantra cada vez que se produzca una situación en la que él o ella te hace daño. Algo así como: “esto no es amor y lo que dice o hace me hace daño”. Las personas inmersas en una relación tóxica tienden a establecer una cierta dependencia hacia esa negatividad, por lo que es importante cortar cualquier contacto si la situación llega a ser límite. 3. Derribar barreras Por último, debemos identificar cuáles son los obstáculos que nos impiden dar el paso y acabar con la relación. Puede ser una barrera emocional, material (por falta de recursos o miedo a perder bienes materiales) e incluso sexual. En cualquier caso, hay que superar el miedo y entender que cualquier persona es capaz de valerse por sí misma. Y nunca estás solo o sola. También puedes leer: Los 5 tipos de celos y cómo detectarlos.