En el pasado, las leyendas servían para explicar el porqué de algunos sucesos históricos que han ocurrido. De esta forma, las leyendas se han perpetuado a lo largo de los siglos, transmitiéndose generacionalmente hasta nuestros días.
En las próximas líneas profundizaremos en las características de estas narraciones que, como suele decirse, no son del todo verdad, pero tampoco mentira; y ofreceremos algunos ejemplos muy conocidos.
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¿Qué es una leyenda?
Las leyendas son historias que se han utilizado para dar sentido a acontecimientos que han ocurrido en la historia de un lugar. No obstante, la leyenda tiene la particularidad de que se mueve entre el terreno de lo realista y de lo sobrenatural, añadiendo toques de ficción al relato, lo que le confiere su seña de identidad más característica.
Características de las leyendas
Ahora bien, una leyenda cuenta con otros rasgos distintivos que pasamos a detallar.
1. Son atemporales
No importa cuántas décadas, siglos o miles de años atrás se supone que ocurrieran, las leyendas se han empleado como recurso para ofrecernos una explicación alternativa a la historia oficial, y no siempre con un soporte sólido de evidencias, sobre ciertos eventos acaecidos.
2. Forman parte importante de la tradición de los pueblos
Gracias a la transmisión oral y escrita a lo largo de generaciones, las leyendas forman una parte importante del folclore de los pueblos y, en consecuencia, de la identidad de sus gentes.
No existe un lugar en el planeta que no tenga arraigado en su tradición oral una leyenda de cualquier tipo, pues como decíamos al comienzo, éstas se han empleado desde tiempos inmemoriales como medio para instruir y entretener.
3. Sufren modificaciones a medida que se transmiten
Una particularidad de las leyendas es que pueden sufrir variaciones según quién la cuente, por lo que no es raro que ocurra que dos narradores diferentes añaden u omiten detalles, o bien alteran en algún punto la historia; aunque el núcleo central y sus elementos principales permanezcan (prácticamente) inalterados.
4. Una explicación misteriosa para sucesos localizados en el tiempo
Siempre se ha dicho que una leyenda no es 100% real, pero que a su vez, tampoco es mentira.
Esta afirmación viene dada porque una leyenda parte de un suceso con base histórica, pero que a su alrededor se han ido añadiendo capítulos aparentemente ficticios, con tal de maquillar la verdad y hacerla más atractiva; bien sea de forma deliberada o como consecuencia de las distorsiones del boca-oreja.
5. No confundir ‘leyenda’ y ‘mito’
A menudo solemos verlas como sinónimos, pero lo cierto es que no son del todo palabras intercambiables.
Los mitos son relatos puramente fantásticos alrededor de los cuales una cultura determinada trata de dar a conocer sus orígenes. Generalmente, los mitos se sirven de seres sobrenaturales y hechos que tienen lugar en una época incierta, muchos años atrás.
He ahí la diferencia con la leyenda, pues aunque ésta puede contener y contiene ingredientes fantasiosos, sí que se localiza en un tiempo concreto, lo que le da más credibilidad que al mito, aun sin poder demostrarse del todo.
Los tipos de leyenda por su temática
Según la temática que nutre las narraciones legendarias podemos hacer una clasificación por leyendas sobre hechos históricos, que explican el origen de fenómenos naturales o accidentes geográficos, sobre el más allá o de carácter religioso. Aquí van algunos ejemplos.
1. Leyendas históricas
También llamadas leyendas clásicas, las leyendas históricas son relatos legendarios basados en hechos históricos reales, normalmente guerras o conquistas. Tuvieron su auge durante el romanticismo, cuando los pueblos intentaron subrayar su grandeza mediante los relatos épicos que mezclaban leyenda y realidad.
Por ejemplo, una de las leyendas históricas más mágicas e interesantes es la de “El Dorado”, originaria del siglo XVI y basada en una ciudad legendaria supuestamente ubicada en el Virreinato de Nueva Granada que contenía grandes reservas de oro. También es popular la leyenda de la Ciudad Blanca o “ciudad perdida del dios mono”.
Otra leyenda histórica inspiradora es la de Barbarroja, originada durante la época en que los sanguinarios y bárbaros piratas era los amos de los mares. Así se forjó el personaje de Barbarroja, un pirata llamado Aruj, natural de Lesbos (Grecia), que luchó contra los cristianos al servicio de los turcos y sembró el pánico en la Costa Brava.
2. Leyendas etiológicas
Así como las leyendas históricas intentan explicar el nacimiento de una nación o el fondo de un hecho histórico, las leyendas etiológicas son narraciones fantásticas que explican el origen de un fenómeno natural o un accidente geográfico. Por eso guarda un parentesco muy cercano con las fábulas o las cosmogonías mitológicas.
Este tipo de leyendas son muy extendidas, sobre todo, en Latinoamérica, donde la naturaleza alcanza unas dimensiones salvajes y colosales. Por ejemplo, la leyenda del volcán de Cerro Prieto cuenta la historia de una hechicera que había sacrificado una doncella del pueblo, y su hermano la vengó prendiendo fuego a la hechicera haciendo erupcionar el volcán.
En España, el País Vasco es una tierra especialmente rica en mitos y leyendas. Una de las leyendas etiológicas más interesantes es el origen del sol y la luna, que además sirve para explicar el origen de la flor típica de ese lugar, la eguzkilorea. Según la leyenda, la madre tierra Amalur regaló el sol y la luna a los hombres para protegerles de los monstruos de la oscuridad, y la flor eguzkilorea como amuleto de protección.
3. Leyendas escatológicas
Las leyendas escatológicas se crean a partir de religiones, creencias y doctrinas que proyectan un tránsito hacia el más allá, hacia la vida de ultratumba o el inframundo. En esta realidad paralela se elaboran narraciones ricas en hechos y personajes que guardan un gran parecido con las historias de fantasmas y de terror.
Un ejemplo de ello es la famosa leyenda de la Llorona, en México, una de las más extendidas de las leyendas de ultratumba. En ella se habla de una mujer que asesinó a su propio bebé arrojándolo al río y, al darse cuenta de los que había hecho, corrió corriente abajo gritando. Se dice que por las noches en los arroyos se escuchan sus gritos y lamentos.
Otra leyenda muy extendida sobre el más allá es la leyenda de Sleepy Hollow, una historia sobre la existencia de un jinete sin cabeza que cabalga hacia la batalla en el valle de Sleepy Hollow, en Nueva York, y que supuestamente es el fantasma de un antiguo combatiente de la Guerra de Independencia de los Estados Unidos.
4. Leyendas religiosas
Las religiones de todo tipo basan sus creencias en hechos mitológicos y legendarios en los que se confunden hechos y personajes de la realidad con la construcción de un universo fantástico. La función de las leyendas religiosas es dotar de contenido los principios y valores de su sistema de creencias, como por ejemplo la justicia, la generosidad o el pecado.
En el cristianismo, una de las leyendas más extendidas es la del Diluvio Universal, según la cual una inundación planetaria arrasó la tierra. Dice la narración contenida en el Libro del Génesis que solo se salvó Noé y su familia, y éste, a bordo de una gran arca, salvó una pareja de cada especie con las que después del diluvio consiguió recomponer la humanidad.
Una religión muy rica en leyendas es el budismo, y muchas de ellas se centran en el mismo nacimiento de Buda. Según la más extendida, su madre, la princesa Mahamaya, tuvo un sueño premonitorio donde era bañada en las aguas cristalinas del Himalaya, antes de dar a luz a un príncipe que se convertiría en Dios. Mahamaya murió siete días después.
Los tipos de leyenda según su origen
También podemos clasificar este tipo de narraciones en función de donde se originan, con lo cual tenemos las leyendas que nacen en espacios urbanos, las arraigadas en los pueblos rurales, y las historias de cada pequeño lugar.
1. Leyendas urbanas
Estas suelen ser las leyendas más populares, porque se extienden rápidamente de forma oral gracias a su atractivo. La gran atracción de estas narraciones es que suelen tener un trasfondo inquietante y terrorífico basándose en situaciones que podrían ser reales, abriendo una puerta hacia la posibilidad de lo irreal.
Existen multitud de este tipo de leyendas que, además, varían según el lugar y se modifican a lo largo del tiempo. Una de las más extendidas es la de la chica de la curva, según la cual el fantasma de una víctima de accidente se aparece durante la noche a los conductores para advertirles de que tengan cuidado con las curvas.
Los japoneses son especialmente sádicos con este tipo de narraciones. Pone los pelos de punta una leyenda urbana japonesa conocida como “Teke teke”, en la que el cuerpo partido por la mitad de una chica que había muerto atropellada por el tren persigue a los jóvenes por la noche. “Teke teke” es el ruido que hace al caminar con los codos.
2. Leyendas rurales
El ámbito rural, susceptible a la sugestión, siempre ha sido un gran propagador de narraciones míticas y legendarias donde desfilan personajes mágicos y hechos milagrosos en historias fascinantes. Con ellas se pretende contar el origen de un lugar o apelar a la protección de supuestas divinidades sobre la cosecha y las propiedades.
Sin ir más lejos, en el frondoso y nebuloso valle del Baztán, en Navarra, se extiende la leyenda de la presencia del Basajaun, un ser mitológico de proporciones monstruosas y una larga cabellera que lejos de tener connotaciones negativas es conocido como el Señor de los Bosques y protector de los rebaños.
De nuevo, México es un lugar especialmente creativo en cuanto a las leyendas, y en muchas localidades rurales se transmite de generación en generación la leyenda del Charro Negro, un apuesto jinete que es la encarnación misma del diablo que tienta a las doncellas del lugar para conducirlas a lomo de su caballo hacia un viaje sin retorno.
3. Leyendas locales
Aunque no son muy extendidas por razones obvias, pues sólo las conocen las personas de cada pequeño pueblo, en realidad son las más dadas a la sugestión, al estar enraizadas en creencias locales que sus lugareños creen a pies juntillas. Hay tantas como regiones y pueblos, tan rica en matices como en historias sorprendentes.
En algunas de ellas se mezclan elementos religiosos. En la ciudad catalana de Manresa, durante un período de larga sequía el obispo del condado se negó a autorizar la construcción de una acequia para canalizar el agua, hasta que una misteriosa luz procedente de la montaña mágica de Montserrat entró por el ventanal de la iglesia como una señal providencial.
Una gran concentración de leyendas locales giran en torno a Trasmoz, en Zaragoza, lugar que durante la caza de brujas fue excomulgado por ser escenario de numerosos aquelarres. Después de que el pueblo fuera excomulgado, el abad propagó una maldición que según cuentan los lugareños sigue causando estragos.
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3 ejemplos de leyendas famosas
He aquí 3 ejemplos de leyendas famosas de diferente clase: de terror, religiosa e histórica.
1. El Mothman
Puede que no todo el mundo haya oído hablar de esta leyenda, que también forma parte de la criptozoología, pero en Estados Unidos saben qué es el Mothman u ‘Hombre Polilla’. Fue en 1966, en Point Pleasant (Virginia Occidental), cuando los habitantes de esta localidad comenzaron a ver a un ser de aspecto humanoide y alado sobrevolando el pueblo. Durante las fechas previas a Navidad, y coincidiendo con los avistamientos, algunos vecinos tenían sueños que parecían anunciar una tragedia en ciernes.
El 15 de diciembre del año siguiente, el puente Silver Bridge se vino abajo, tras no poder soportar el peso de una larga hilera de coches que colapsaba la estructura. El saldo total fue de 46 muertes. Tras el suceso, los lugareños consideraron que las visiones de aquella extraña figura de 2 metros y ojos rojos que habían tenido durante todo un año, habían sido un presagio de muerte.
A partir de ese momento, el Mothman dejó de verse en Point Pleasant y comenzó a aparecer en otros lugares del planeta durante los años siguientes, hasta la actualidad (Chicago, Cornualles, Santiago de Chile y en el mismísimo Chernobyl, por citar algunos ejemplos).
La casualidad quiso que previa a todas sus apariciones, se hubiera registrado actividad OVNI en la zona.
2. El sudario de Turín
Las religiones han dado pie a muchas leyendas de todo tipo. Leyenda para algunos o evidencia probada para otros, la que concierne a la ‘Sábana Santa’ es una de las más célebres del catolicismo.
Supuestamente, el sudario de Turín es el manto que cubrió el cuerpo de Jesús durante los 3 días posteriores a su crucifixión antes de resucitar. Tanto sangraba por la gravedad de sus heridas, que en la tela de lino quedó grabada la forma del icónico rostro de Cristo (un hombre de delgadas facciones, con cabello largo y barba). Desde entonces y durante siglos, la prenda se ha conservado como prueba fehaciente de que los sucesos narrados en el Nuevo Testamento son verdad.
A pesar de que muchos fieles peregrinan a Turín para venerar al manto sagrado cada año, todavía no se ha confirmado su autenticidad y se han barajado múltiples explicaciones plausibles de por qué podría tratarse de un fraude y no de ningún milagro.
3. El Rey Arturo
Un ejemplo de leyenda histórica es la que rodea a esta figura, clave para la historia de las Islas Británicas y de la Bretaña francesa. Se dice que Arturo, junto con sus doce valerosos caballeros, recorrieron la campiña inglesa realizando grandes proezas durante la edad medieval, entre ellas querer encontrar la reliquia más famosa de todos los tiempos: el Santo Grial.
No obstante, los historiadores no se ponen de acuerdo a la hora de ubicar en el tiempo a la leyenda artúrica, ya que nuevas fuentes aseguran que habría tenido lugar a finales de la época romana.
Sea como sea, ni la existencia de Arturo, Lancelot, Ginebra (o el resto de sus caballeros), ni la de la mítica ciudad de Camelot, han quedado demostradas.
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