Su pelo encrespado, sus pobladas cejas, sus gafas de culo de botella, pero especialmente su bigote negro pintado, hizo de él todo un icono de la comedia. Con estas frases de Groucho Marx más graciosas rendimos homenaje a uno de los artistas con un humor más especial del Hollywood en blanco y negro.
Ya te advertimos que en este listado no encontrarás el supuesto epitafio de Groucho Marx que siempre se ha dicho que reza en su tumba; eso no es más que una invención. Sea como sea, 41 años después de su muerte, el humor ácido de Groucho todavía consigue arrancarnos una sonrisa.
¿Se refiere a que nació en una época que no le tocaba o simplemente está comentando una obviedad? Al fin y al cabo, cuando nacemos, todos tenemos una edad muy temprana...
Una de las frases de Groucho Marx más divertidas y conocidas, extraída del film Una noche en la ópera (1935) en la que aparece junto a Harpo y Chico, sus hermanos en la ficción y en la vida real.
Tras una petición para unirse al “Friars Club of Beverly Hills” en la que fue rechazado sin saberse quién era, los responsables trataron de disculparse readmitiéndolo de nuevo en cuanto se dieron cuenta del error. No obstante, esta vez fue Marx el que declinó la oferta.
Una crítica irreverente hacia la sociedad americana de la época, en la que los escarceos amorosos fuera del matrimonio eran habituales.
Generalmente, quienes actúan como tal es porque en realidad lo son.
Una obviedad tan clara que asusta.
Entre las irreverentes frases de Groucho Marx encontramos esta perla que reprende la tendencia de muchas personas a cambiar de ideales según les convenga.
El actor del bigote pintado no creía en la integridad de las personas.
Una increíble lección que ha llegado hasta nuestros días y de la que incluso Los Simpson se hicieron eco.
Otro ejemplo de la incorrección de Groucho Marx hacia los demás.
Porque todo el mundo habla, pero pocas personas dicen nada.
Este comediante no tenía pelos en la lengua y mucho menos, vergüenza.
Sin embargo, la vida está llena de absurdidades.
Está claro que en aquellos tiempos se podía bromear. Hoy en día las frases de Groucho Marx más incisivas hacia las mujeres no pasarían el filtro de la censura y, por ellas, se le sometería al escarnio y humillación públicos hasta que se retractase.
Parece que, ya desde la primera mitad del siglo pasado, la tendencia a leer libros ya comenzó a decrecer.
Una clara referencia a la tendencia de muchas personas a maquillar las verdades para quedar bien.
El que tiene dinero se puede permitir incluso caer en desgracia o no. El que no lo tiene, cae en desgracia inexorablemente.
Una mordaz burla a la pena de muerte.
Esta es una de las frases de Groucho Marx que sirve para ilustrar lo que es el conocido como ‘efecto Mandela’: durante mucho tiempo, se dio por hecho que la cita más famosa de Los Hermanos Marx van al Oeste (1940) rezaba “¡Más madera!”, pero en realidad es “¡Traed madera!”.
El humor, como todo en la vida, debe saber emplearse en el momento oportuno.
El humor absurdo era la seña de identidad de Groucho Marx.
Un malicioso comentario que deja entrever que, de conocerlos, el mayor de los hermanos Marx no podría considerarlos como tal.
Groucho Marx siempre será recordado por su desfachatez.
Las frases de Groucho Marx no serían bien recibidas en una época donde impera la creencia (errónea) de que cada individuo es un hermoso y único copo de nieve que merece que le ocurran cosas buenas por su cara bonita.
Lo cierto es que la madre los hermanos Marx siempre los apoyó en su carrera.
El alcohol tiene el curioso efecto de endulzar la realidad, aunque sea por momentos.
Alguien debería haberle dicho al actor que no se puede juzgar un libro por la portada.
Una forma efectiva de cubrirse las espaldas.
Esperemos que no fuera lo que le dijo a su acompañante la noche en que perdió la virginidad.
¡Quién tuviera el poder de olvidar a voluntad una cara!
Mejor no hablar demasiado si no se está dispuesto a llevar las consecuencias de nuestras palabras a término.
De las frases de Groucho Marx sobre el dinero, tal vez esta sea la más representativa de su pensamiento.
Si pareces y actúas como un idiota, entonces tenemos malas noticias para ti.
Una feroz forma de atacar la actitud sumisa de muchos hombres ante las mujeres.
Siempre que sean ajenos, los fracasos hasta son bien recibidos.
Groucho Marx se metía así con la hipocresía que parece haberse instaurado en las relaciones interpersonales.
Una forma muy efectiva de mostrar el desagrado que nos provocan ciertas personas
Un dardo dedicado a los Testigos del Amor Romántico.
Esta es una de las frases de Groucho Marx sobre la política que mejor definen en qué consiste este…¿Arte?
Una cita con un importante mensaje: el chiste no cabe en la verdad.
Groucho Marx, un auténtico galán que sabía encandilar a las damas.
¡Y que encima nos dé conversación! ¡Socorro!
Otra forma de decir “eres incómodo de ver”.
Al pobre Groucho Marx le iban a entrar los mil males si viera cualquier película actual en las que los actores lucen unos pectorales que parecen esculpidos en la roca.
El actor no dejaba que las supersticiones condicionaran su vida.
No son pocas las frases de Groucho Marx más graciosas dedicadas a los desencuentros amorosos.
Siempre encantado de conocerse.
Cada persona ordena sus prioridades a su manera, ¿No es cierto?
Tampoco faltaban sus increíbles muestras de autoestima y seguridad en sí mismo.
Si sólo estaba pretendiendo ser comediante durante tantos años, lo fingió a la perfección.
La solución a tus problemas no está en el fondo de una botella, Groucho.
Esperemos que el cómico no le dedicara esta perla a ninguna de sus amantes.
Estamos seguros de que empleando cualquiera de estas frases de Groucho Marx, cualquiera se hubiera ganado muchos enemigos.
Tal y como reza un antiguo dicho español: “El mejor desprecio es no hacer aprecio”.
Probablemente por eso, Groucho Marx se casó tantas veces.
¿Es posible no cometer errores si evitamos actuar como otros han hecho previamente o es un paso necesario para nuestro aprendizaje?
Otra de las frases de Groucho Marx sobre el dinero con más mala uva.
Uno de nuestros males endémicos más extendidos: criticar algo sin conocerlo a fondo.
No hay que tomársela a broma.
Viendo cómo está el panorama, un servidor también.