Hay un dicho que dice que cuando Disney coge algo, lo convierte en algo muchísimo mejor, o al menos ese era el concepto en el que Walt Disney decidió articular sus primeras producciones. La adaptación en formato animado de cuentos clásicos, pero desde la perspectiva de la compañía, llevándolos al cine familiar.
Recientemente, con el remake en Life Action de ‘El Rey León’ (1994), ha surgido una polémica en torno a la originalidad del diseño de los personajes del film, así como de la trama en sí; y es que al parecer, el film original tomaría como fuente de inspiración‘Kimba, el león blanco’, de Eiichi Yamamoto (1965).
Osamu Tezuka, fue uno de los padres de la animación japonesa, creó el manga El Emperador de la Jungla, que narraba las aventuras de Kimba, un león blanco que debía sobrevivir en la jungla, tras haber sido dado muerte su padre y ser su madre capturada por unos cazadores furtivos.
En la jungla reinaría ahora el tío de Kimba, auténtico asesino de su padre, ¿les suena todo esto? Cualquiera diría que Tezuka se hubiera inspirado en el Hamlet de Shakespeare, para desarrollar esta historia y luego adaptarla en la serie de 1966 que duraría hasta principios de los 80.
En 1989 fallecía Tezuka, y ese mismo año, Disney iniciaba la producción sobre un león amarillo, llamado Simba, que sería desterrado de su reino, siendo su padre, Mufasa, asesinado por su tío Scar… ¿Coincidencia?
Muchos opinan, que indudablemente Disney plagió el anime, aprovechando que el autor había finado, y de esa manera lavarse las manos. Esto no se trataría meramente de una coincidencia del argumento: el diseño de los personajes, los momentos claves de la trama, así incluso algunas ideas visuales de la serie japonesa, fueron reproducidas (y mejoradas, por supuesto) en el film de Rob Minkoff y Roger Allers.
Les hemos dejado algunas imágenes del film de Disney y del anime de Tezuka para que ustedes lo valoren; también hay un vídeo comparativo de Youtube, aunque el canal Zoom F7 ofrece un vídeo de análisis sobre esta cuestión que también les será muy grato de ver.
Disney jamás ha reconocido hasta la fecha que se inspirarse en Tezuka, ni que conociera el anime de Kimba, el león blanco. Así mismo, la educación nipona del estudio de animación de la serie no ha vuelto a pedir cuentas al gigantesco estudio estadounidense; pues, al parecer, Tezuka era un gran admirador de Walt Disney.
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