Las previsiones de altos porcentajes de ocupación, por encima del 60% dejan a los siguientes grados como las carreras de ciencias sociales y de la salud con más salidas en España. Si estás dudando sobre qué estudiar, no te pierdas la siguiente lista.
Los nuevos retos de la sociedad, las nuevas tecnologías, la gestión de datos y la relevancia de las profesiones médicas abren un amplio abanico de posibilidades a los nuevos estudiantes.
En las ciencias sociales, algunos grados como Derecho se mantienen como opción de futuro, Administración de Empresas sigue siendo la gran carrera emergente, y además se posicionan algunas nuevas que responden a las necesidades de las nuevas tendencias.
Sigue siendo la carrera de ciencias sociales con un futuro más prometedor. Con una tasa de empleo superior al 80%, este grado asegura una amplia gama de funciones y carreras profesionales que incluye la gestión, la consultoría, la estrategia de negocios, los recursos humanos, las relaciones laborales, las políticas públicas y más.
Actualmente los estudios que permiten tener una base sólida en este campo incluyen formación en contabilidad, sistemas informáticos, teoría micro y macroeconómica finanzas, derecho y marketing.
La carrera de Derecho se ha mantenido siempre como una de las preferidas en la rama de las ciencias jurídicas y sociales. Con una tasa de ocupación superior al 60%, esta se dispara con la especialización en posgrados.
Derecho es una de las carreras con más salidas profesionales y, además, es una vocación muy bien remunerada. Por la complejidad de sus estudios, es además una buena opción por la movilidad profesional (permite especializarse en varias ramas), lo que permite saltar de un sector a otro. Además, facilita la preparación para oposiciones.
Antropología ha sido históricamente una de las carreras de ciencias más denostadas por su desconocimiento. Sin embargo, con una formación adecuada y una especialización bien orientada puede ser uno de los grandes filones en las ciencias sociales.
En su global, la tasa de ocupación de los antropólogos ronda el 70%, pero tiene una ventaja: es una de las carreras con más estabilidad laboral. Dentro de su estructura, lo mejor es hacer un posgrado en antropología social y cultural, que es la que ofrece más salidas porque integra estudios de diversidad cultural, procesos transnacionales y nuevas maneras de identidad.
Otro mito negro se cierne sobre la Sociología como disciplina arrojada al fracaso laboral. Según el Instituto Nacional de Estadística más del 70% de los estudiantes de sociología salen con trabajo, en un espectro que va desde el estudio del comportamiento humano y la familia hasta los resultados electorales y los factores sociales.
Por su versatilidad, esta carrera permite especializarse en campos como la educación, administración pública, la investigación teórica y el ejercicio profesional práctico asesorando empresas y realizando análisis de mercado, políticos y sociales.
La sociedad del futuro se está proyectando a través de las nuevas tecnologías y las bases de datos, por eso últimamente la carrera de ciencias de biblioteconomía y documentación ha pasado a ser una de las más codiciadas de las ciencias sociales.
Hay que decir que en estos momentos el porcentaje de ocupación de esta carrera es bajo, pues no llega al 60%, pero tiene muy buena proyección de futuro siempre que el estudiante se forme en los retos del futuro como gestor de datos en la era digital.
Las nuevas necesidades sociales han introducido amplios debates acerca de la urgencia de revisar determinados métodos pedagógicos, introduciendo novedosas vertientes como la pedagogía de la realidad, que consiste en aproximarse al alumno a través de las experiencias que éste vive en su día a día.
Esta es solo una de las novedades que afronta esta disciplina cada vez más crucial para el incierto futuro de las sociedades occidentales. Esto, en España, abre un futuro prometedor para estos estudiantes cuya formación garantiza una creciente tasa de ocupación.
En la actualidad existe una corriente de pensamiento negativa acerca de las posibilidades de la Criminología en el mundo mercantilista actual. No les falta parte de razón, pero esto es porque se trata de una disciplina en expansión en España.
Aun así, ya cuenta con más del 85% de ocupación, y por eso se cuela entre las carreras con más futuro en España en el ámbito de las ciencias sociales. Según los expertos, la criminalidad y el control social no son procesos aislados o estáticos, y la Criminología ofrece el soporte donde desarrollar soluciones con una perspectiva multidisciplinar.
Los avances en los campos de la biología, la electrónica y la genética humana están introduciendo nuevas posibilidades e instrumentos para el diagnóstico y el tratamiento en el sector de la salud, que está llamado a ser uno de los grandes ámbitos de ocupación.
Un 97% de los estudiantes de medicina salen con trabajo. Es sin duda la carrera con más ocupación, y sus perspectivas de futuro no solo no aminoran el paso sino que abren un abanico mucho más amplio gracias a las posibilidades de las nuevas tecnologías.
Además, es una realidad que la población europea (y en España especialmente) envejece cada vez más, y aparecen nuevas enfermedades que exigen la incorporación constante de profesionales médicos en el sistema público y privado. En un futuro esa tendencia irá a más, y harán falta más médicos y mejor formados.
La tasa de ocupación de los veterinarios va creciendo (ya está superando el 80%) en un sector cada vez más diversificado. Los graduados en Veterinaria pueden trabajar como médicos y cirujanos, pero también en el ámbito del control sanitario y la producción de animales en granjas, ganaderías, piscifactorías, etc.
Pero no solo eso: los aumentos de controles sanitarios en el mercado europeo permiten a los veterinarios trabajar también en la inspección de alimentos de origen animal, y en laboratorios de ingeniería genética y biotecnológica.
Según estudios recientes, el 76% de los graduados en Odontología encuentran trabajo, la mayoría relacionado con su ámbito laboral. El éxito de esta carrera hace que sea cada vez más demandada y, además, ofrece un futuro brillante.
Como sucede con la medicina, se trata de una demanda que no disminuye porque trata problemas de siempre que no desaparecerán con el tiempo. Además, el avance tecnológico introduce mejoras en el análisis y el perfeccionamiento, por ejemplo, en ramas como la ortodoncia o la implantología. Un trabajo con garantías y muy bien pagado.
Aunque se trata de una disciplina relativamente nueva, ha alcanzado una gran competencia con el resto de las del ámbito de la salud. Cada vez más se utiliza la fisioterapia como un tratamiento complementario para la mejora de problemas musculares, óseos y demás.
Esta rama de la medicina ha ido adquiriendo poco a poco gran prestigio como evolución de la osteopatía, y su principal función sigue siendo la de ayudar a la recuperación del organismo tras un proceso traumático. Ya no se ve al fisioterapeuta como un masajista, sino como un profesional médico que, además de tener cada vez más trabajo, gana más dinero.
Según las tasas de ocupación en las carreras de ciencias, un 75% de los que estudian enfermería salen con trabajo, un 85% de estos con un empleo acorde a sus estudios. Las reivindicaciones laborales que exigen dar más valor al trabajo del personal de enfermería avanza en paralelo a la constatación de que estos profesionales seguirán siendo indispensables en el futuro.
El reto de la enfermería en los años que vienen será adaptarse a las nuevas tecnologías, pero también desarrollar un tratamiento especializado y adaptado a cada paciente y perfeccionar su perfil profesional en aptitudes como la polivalencia y la flexibilidad.
Ahora mismo el más del 80% de los estudiantes de Farmacia trabajan de lo suyo, una cifra muy apetecible que se proyecta al futuro con un gran potencial. El futuro de esta disciplina está orientado hacia la farmacia asistencia (es decir, más sanitaria).
El farmacéutico es un profesional sanitario, y como tal estos deben saber preocuparse de que los pacientes utilicen correctamente su medicación. La expansión de este ámbito sanitario depende de la profundización de la vertiente sanitaria de la disciplina farmacéutica, y por eso las instituciones están dando cada vez más importancia al protocolo.
Con los años, afortunadamente, se ha ido visibilizando en la sociedad el sector de la población con discapacidades físicas y se avanza a pasos agigantados en el tratamiento médico y asistencial para que esas personas ganen independencia y dignidad.
Eso explica el auge de una carrera como la Terapia Ocupacional, que aún cuenta con un rango mediano de ocupación (un 70% de los graduados encuentran trabajo) pero que tiene unas perspectivas muy positivas. La formación se centra en la valoración de las capacidades y problemas físicos, psíquicos, sensoriales y sociales del individuo para su tratamiento.
Muchos consideran que los dietistas-nutricionistas son los profesionales del futuro, y están sin duda llamados a cubrir las crecientes preocupaciones del individuo por la salud y el aspecto físico. Es, sin embargo, un sector aún muy en ciernes, pues solo en torno al 60% de los graduados encuentran trabajo, y la mayoría tienen que recurrir al autoempleo.
Las perspectivas, sin embargo, son muy optimistas y contemplan el desarrollo futuro de un sector importante de la nutrición, su integración progresiva en el ámbito de la sanidad pública y privada, y la incorporación del profesional en equipos multidisciplinares.