Los adolescentes son complicados. Por eso, estas series para adolescentes pueden ayudar a los adultos a comprender qué ocurre en sus jóvenes cabezas. Si ya has dejado atrás la etapa del instituto, te explicamos varias buenas razones para engancharte a una de estas producciones.
Existen cientos de series ideales para el público adolescente, pero hemos escogido las más recomendadas, tanto por el público como por la crítica.
Los guionistas de la mítica serie Skins (que repasamos más adelante) vuelven a la carga con un drama adolescente cargado de fiestas salvajes, drogas y sexualidad. La trama de esta producción de la BBC, sin embargo, se centra en la vida de dos universitarias que se inmiscuyen en asuntos muy turbios de hombres de negocio.
Tras el taquillazo de Crepúsculo, varios productores de la pequeña pantalla aprovecharon el filón e idearon series para adolescentes con componentes fantásticos. Es el caso de Crónicas vampíricas que, aunque está basada en la saga literaria de L.J. Smith, hace especial hincapié en los amoríos de vampiros.
Por supuesto, la serie nunca se convirtió en un fenómeno equiparable al de Crepúsculo, pero duró ocho temporadas (muy amenas) y recibió críticas muy positivas por parte del público. Al final y al cabo, se trata de darle al espectador lo que quiere.
Nos llegó de la mano de MTV España y Bloomber Latinoamérica, pero lejos de ser un éxito pasajero e insulso, Pretty Little Liars se convirtió en la serie para adolescentes por excelencia. Una historia plagada de secretos e intrigas dónde nadie es lo que parece.
Su éxito radica en el carisma de las cuatro protagonistas, con las que cualquier chica teen se puede sentir identificada. Además, aborda temas relevantes de la adolescencia como la orientación sexual o la droga.
La siguiente de las series para adolescentes que presentamos se estrenó al mismo tiempo que One Tree Hill y cosechó un éxito muy parecido. A lo largo de cuatro temporadas, somos testigos de cómo un chico recién salido del reformatorio se integra en una familia acaudalada.
Una particular mezcla de drama y comedia desarrollada en el sur de California, con una banda sonora digna de mención (aparecen bandas de la talla de U2 o Coldplay) y un desenlace que no dejó indiferente a nadie.
Esta serie para adolescentes noruega retoma el testigo de Skins y nos presenta un grupo de compañeros de instituto con sus quehaceres habituales (básicamente practicar sexo y consumir drogas). Una serie sin tapujos que aprovecha los nuevos formatos, y es que originalmente se estrenó como una webserie en la página NRK.
Llevan ya unas cuatro temporadas y la acogida ha sido buenísima, aunque por algún motivo que no alcanzamos a comprender, ni Netflix ni HBO han comprado los derechos. Movistar + estrenará la versión española, aunque por el momento no sabemos cuándo.
Si estás cansado de monerías y quieres ver una serie protagonizada por adolescentes que se aleje completamente de la norma, tendrías que echar un vistazo a The end of the fucking world. Se estrenó en el Channel 4 del Reino Unido, pero está disponible en Netflix.
La serie nos cuenta las vicisitudes de James, un psicópata declarado, y su nueva novia Alyssa, a la que pretende asesinar. Los capítulos duran unos 20 minutos, así que te puedes ver la primera temporada en un santiamén.
Otra de las series para adolescentes que puedes encontrar en el catálogo de Netflix es Riverdale, una producción que coquetea con el género thriller y que ya ha renovado por una segunda temporada. Lo malo: que Riverdale ha tenido la mala suerte de coexistir con otro fenómeno adolescente como Por 13 razones.
Otra serie de culto en el Reino Unido con un planteamiento original. Un grupo de jóvenes se ve sorprendido por una tormenta que les otorga superpoderes, y tratándose de adolescentes, las situaciones irreverentes están servidas.
Es precisamente ese tono gamberro y desenfadado el que captó la atención de cientos de miles de espectadores en Europa, aunque la producción no desembarcó en Estados Unidos. Cinco temporadas muy recomendadas que siempre estás a tiempo de ver.
La serie para adolescentes más famosa de la historia de la televisión es One Tree Hill. Tiene todos los ingredientes esenciales para ser el drama teen perfecto: un equipo de baloncesto, un grupo de animadoras, buenas dosis de violencia y sexo y una banda sonora que se alejó del pop y apostó por la música indie de principios del 2000.
Las primeras cinco temporadas son lo mejor que verás en el género. Sin embargo, las dos últimas se llenaron con giros de guión imposibles de digerir, con sexo gratuito y nuevos personajes que no calaron entre el público.
Skins es una de esas series adolescentes anterior a las grandes plataformas de streaming. Sigue pareciendo actual gracias al increíble trabajo de cásting, la crudeza de su cotidianidad y la valentía de tratar todos los temas que interesan a cualquier joven actual: drogas, sexo y música electrónica.
Cada par de temporadas trata una generación de estudiantes, y esa fue una de las claves de su longevidad. Los que somos fans de esta serie estamos esperando ansiosos el día en que los responsables retomen el proyecto. ¡Netflix, escucha nuestras plegarias!
Una serie por y para adolescentes que, con apenas dos temporadas, ha regado las arcas de Netflix con millones de dólares. El drama del suicidio de Hanna Baker es el caldo de cultivo para una trama que a primera vista parece inocentona y empalagosa, pero que te va calando en lo más hondo con cada episodio.
Tal ha sido el éxito de esta serie que ha sido renovada por una tercera temporada, a pesar de que el suicidio de la adolescente ya no es el tema principal. Antes de que pienses que es otra serie teenager abocada a morir de éxito, échale un vistazo.