La vista es probablemente uno de los sistemas sensoriales más complejos con los que los seres vivos contamos, probablemente por su fuerte implicación en la supervivencia. Por ello, este sentido sea de vital trascendencia. Hablar de las partes del ojo humano es hablar de intrincadas estructuras que abarcan desde la parte exterior de la cabeza, hasta la zona más interna del cráneo.
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¿Qué es el ojo humano?
Es conveniente que, antes de ahondar en el análisis de las partes del ojo humano y sus funciones, hagamos un breve repaso en la definición de estos órganos y su función.
Los ojos son los encargados de captar la información visual y procesarla, en forma de impulsos eléctricos, hasta el lóbulo occipital del cerebro, situado en la parte posterior de la cabeza. Una vez alcance este área, el cerebro descompondrá los datos recibidos según las formas, colores, texturas, profundidad y movimiento captados; permitiéndonos crear una imagen mental entendible.
Cabe decir que, como técnicamente es el cerebro humano el que “ve”, cada individuo percibirá la realidad que le rodea de forma diferente, por lo que dos personas que contemplen lo mismo, realmente no estarán viéndolo de la misma manera.
7 partes del ojo humano externas
Al inicio comentábamos que hay partes del ojo humano localizadas en el exterior, debido a su papel en la captación de la información que nos rodea, así como de la protección de aquellas zonas más sensibles.
Veamos, desde fuera hacia dentro, en qué áreas se dividen las partes del ojo externo.
1. Párpado
Los párpados son los pliegues de piel que recubren los ojos. Su función es mantener humedecidos los globos oculares con cada parpadeo (acciones reflejas no controlables), además de limpiarlos de todas las partículas sólidas que están suspendidas en el aire y que pueden dañar las zonas más sensibles del ojo externo.
2. Globos oculares
El nombre científico con el cual se designa a lo que coloquialmente llamamos “ojos”: los globos oculares no son más que los órganos esféricos que contienen el resto de partes del ojo que veremos a continuación. Se ubican en las cuencas oculares (también llamadas ‘órbitas’), sendos huecos situados en la parte frontal del cráneo donde se encajan.
Ambos globos oculares están divididos en lo que se denomina ‘cámara anterior’ y ‘cámara posterior’. La primera sección, está ubicada entre la córnea e iris y contiene el humor acuoso. La segunda cámara, contiene el humor vítreo y las demás partes del ojo. Estos dos líquidos deben ajustar la presión de dentro del ojo y mantener cada zona en su posición correcta.
3. Esclerótica
Los globos oculares cuentan con esta membrana protectora, que los rodea y tiñe con su distintivo pigmento blanco, además de servir para la protección de las partes del ojo internas.
La esclerótica alcanza desde la córnea (parte frontal del ojo y lo que vemos cuando están abiertos) hasta la zona posterior del ojo, la que no vemos a simple vista. Allí, la esclerótica no está cerrada del todo, ya que así permite que la retina (la membrana situada debajo) se conecte al nervio óptico y éste prosiga su recorrido hacia el interior del cráneo.
4. Córnea
La córnea es la parte del ojo central, ubicada de forma que está en constante contacto con el exterior, al menos mientras los ojos no se cierren. Debido a su localización, su papel principal es básicamente protector, algo fácilmente deducible si atendemos a su forma cupular y transparente.
Otra tarea de la córnea consiste en proteger al iris y al cristalino, aunque también se encarga de refractar y filtrar la luz captada hacia el resto de estructuras oculares.
5. Iris
Si coloquialmente llamamos a la esclerótica “el blanco de los ojos”, cuando hablamos del iris nos estamos refiriendo a esa parte del ojo que le da color y en la que nos fijamos cuando decimos que alguien tiene un color de ojos bonito. Esta coloración es posible gracias a la acción de melanina.
Se trata de una estructura muscular en forma de disco, que tiene en su parte central la pupila, de modo que el iris realizará los movimientos de contracción (miosis) o dilatación (midriasis), según la cantidad de luz recibida del exterior.
6. Pupila
Abertura central del iris con aspecto circular y color negro. Según la intensidad del haz de luz que penetre a lo largo de las anteriores partes del ojo, y como resultado de la midriasis o miosis, la pupila reaccionará dilatándose o contrayéndose.
7. Cristalino
Hemos incluido el cristalino en el subgrupo de partes del ojo exteriores, aunque su localización es ya interna. No obstante, si realizáramos un corte virtual a un ojo, lo encontraríamos en la zona anterior-medial de estos órganos, de modo que lo dejaremos aquí.
Como decíamos, el cristalino es una estructura lenticular, incolora y transparente, que está detrás del iris. Su labor consiste en enfocar la visión según la distancia a la que se encuentren los objetos (corta, media y larga). Más importante si cabe que esta función, el cristalino debe desviar la luz del exterior hacia la retina, para que se propague a través de las siguientes partes del ojo, camino al cerebro.
6 partes del ojo del ser humano internas
Después de recorrer las capas exteriores del ojo, vamos con las partes situadas dentro, tanto de los globos oculares como del cráneo en sí.
8. Humor acuoso
Ya hemos hablado de este líquido en el punto referido a los globos oculares, pero profundicemos un poco más.
Mencionábamos que el humor acuoso está en la cámara anterior de los ojos, entre la parte posterior de la córnea y la zona anterior del cristalino. Esta posición privilegiada lo convierten en una de las partes del ojo más esenciales, debido a su función hidratante: ni el cristalino ni la córnea están vascularizados, por lo que si no es por el humor acuoso, no estarían lubricadas.
Además, el humor acuoso tiene un papel estabilizador de la presión, gracias al cual el resto de estructuras se mantienen siempre firmes en la misma posición.
9. Conjuntiva
Insistimos en que la visión es un sentido vital que interesa conservar prácticamente intacto, de lo contrario la supervivencia de muchas especies que dependen de él estaría fuertemente amenazada. Por esta importante razón, en lo que se refiere a la protección de los ojos, cuantos más estratos, mejor.
La conjuntiva es una capa transparente que rodea la esclerótica. Esta fina lámina mantiene el ojo hidratado prácticamente todo el tiempo, a partir de la segregación de aceites naturales que contribuyen a este fin. Al estar las paredes oculares siempre húmedas, se previene la filtración de microbios al interior del ojo.
10. Coroides
La esclerótica y la retina están separadas por una membrana intermedia llamada ‘coroides’, cuya función es nutrir y oxigenar a la segunda para su óptimo funcionamiento. Igualmente, esta estructura muy vascularizada mantiene la temperatura constante a los ojos.
11. Humor vítreo
El humor acuoso se encuentra en la cámara anterior del ojo, mientras que el humor vítreo está en la cámara posterior de cada globo ocular, entre el cristalino y la retina. Este líquido llena dicho espacio, es más espeso que su homólogo y otorga rigidez al órgano visual, manteniendo en su sitio a las demás partes del ojo.
12. Retina
Es la membrana más interna que reviste el globo ocular. Contiene las células encargadas de procesar los estímulos visuales, los ‘conos’ y ‘bastones’, dedicadas a la visión diurna y a la distinción cromática las primeras; y a la visión nocturna e imágenes en blanco y negro, las segundas.
13. Nervio óptico
Red de fibras nerviosas cuya principal tarea es la transmisión de los estímulos lumínicos (en forma de electricidad) hasta el lóbulo occipital, donde serán reconocidos y otorgarán sentido a lo que se ha procesado.
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