A menos que seas un experto o experta en el sexo, el primer encuentro con alguien en la cama suele ser bastante aparatoso. Os traemos diez trucos sexuales para dejar a tu pareja sin palabras en la primera cita. Si todo ha ido de lujo hasta el momento, es posible que a ambos os apetezca ponerle el broche de oro a la noche, y no hay nada de malo en disfrutar de la sexualidad en el primer encuentro. Ella no es una facilona y él no es un campeón, asumámoslo de una vez.
Estos diez consejos infalibles harán que tu primera experiencia con esa persona sea inolvidable. Quién sabe si os volveréis a ver otra vez.
El primer consejo que os podemos ofrecer es que no acudas a la cita hecho un cuadro, ya que el estilismo es un factor importante en la primera cita. Incluso en el momento de quitarse la ropa, una buena imagen sigue siendo un elemento de atracción para tu pareja sexual. Muchos piensan que no hay nada más hortera que un hombre desnudo pero con calcetines, así que puedes empezar por ahí.
Escoged bien el lugar dónde lo haréis o puede que todo resulte el doble de difícil. Si optáis por el coche, ten por seguro que os va a resultar imposible hacer según qué posturas. Casi todo el mundo se decanta por la cama o el sofá (la opción más cómoda), pero si os veis con ganas, es hora de probar la lavadora o la mesa del comedor. Eso sí, límpia todo después o puede que tus invitados no vuelven a poner un pie en tu casa.
Uno de los trucos que más funcionará es la charla previa, esa que puedes ir llevando a cabo incluso durante la cena o el paseo a casa. Calienta el ambiente con sugerencias indecentes y el deseo irá en aumento. Cuando llegue la hora de la verdad, no tengas prisa por poner en práctica todo eso que habéis hablado.
Una primera cita no es un examen de final de carrera, así que tranquilidad. La típica excusa de ir al baño para asearte te puede resultar útil. Cuando estés ahí, respira profundo unas cuantas veces hasta que estés listo o lista.
Los preliminares funcionan en cualquier encuentro sexual, así que ponte cómodo y disfruta el momento. Los polvos de “aquí te pillo, aquí te mato” están muy bien, pero si solo hay penetración os estaréis perdiendo una parte muy importante del sexo, y muy placentera. También es una buena vía para llegar al orgasmo más rápido. Si hay sexo oral, asegúrate siempre de que los dos estéis en las condiciones higiénicas adecuadas.
Es tu primera vez con esa persona y, para qué engañarnos, aún no la conoces del todo. Está bien tratar de impresionar con un espectáculo de contorsionismo, pero asume que no te sabes todas las posturas del mundo y que, en ocasiones, las posturas más simples son las más efectivas. Trata de buscar aquellas que dominéis a la perfección y que os proporcionen un mayor contacto.
Este es el mejor consejo que les podemos dar a ellas: no os empeñéis en alcanzar el clímax cuanto antes. No todo está en el orgasmo, sino en disfrutar del momento y la experiencia sexual. Es normal que no llegues a culminar si no conoces bien a tu pareja sexual. Quizás llegue el momento en el que encuentres esa postura o movimiento que te haga llegar al punto de no-retorno.
Este es el mejor consejo que les podemos dar a ellos: aprende a moverte en otras direcciones que no sean “adelante y atrás”. Este suele ser un error común también en las relaciones estables de pareja, y es que tan importante es el tamaño como el saber hacer. Trata de buscar puntos diferentes en tu pareja y, si hay la confianza suficiente, deja que ella te diga en qué debes centrarte. No se trata de percutir a alguien como si se tratara de un clavo, a menos que sea eso lo que esté buscando.
El humor ayuda a establecer relaciones de confianza, también en el sexo. Tómate las cosas con humor y ríete de tus torpezas para que el ambiente sea mucho más agradable.
Por encima de todo, respeta los gustos, las decisiones y las libertades de nuestra pareja sexual. Si hay algo que no le guste hacer, no insistas en ello o puede que la frustración se apodere de vosotros. No tengas miedo de decir lo que te gusta a menos que tengas una parafilia muy extraña.
El sexo de cualquier manera, pero siempre seguro. Utilizar preservativo es la forma más eficiente de prevenir enfermedades de transmisión sexual y evitar embarazos no deseados. No te la juegues, y menos si acabas de conocer a la otra persona.