Unas predicen la llegada del Anticristo y el fin del mundo, otras ven a la humanidad como una clonación genética creada por dioses extraterrestres. Las sectas en España que siguen en activo son a veces simples rarezas antropológicas, pero en otros casos son auténticas organizaciones delictivas que suponen un auténtico peligro.
Delitos sexuales, secuestro, abusos psicológicos y físicos, proselitismo agresivo, control autoritario, manipulación, lavado de dinero y extorsión son solo algunos de los delitos que pesan sobre estos cultos.
CONTENIDO DEL ARTÍCULO
1. ¿Qué es una secta y cómo funciona?
2. ¿Cuántas sectas hay en España?
3. Las 10 sectas en España más asombrosas.
Una secta es un grupo de individuos unidos por un sistema de creencias generalmente minoritario y escindido de la doctrina general.
En su origen se utilizaba el concepto de secta para denominar a las interpretaciones alternativas a la doctrina oficial católica, pero en la actualidad el término agrupa aquellos grupos cuyas creencias religiosas o filosóficas suponen un peligro para la comunidad. Su rasgo principal es el hermetismo, la persuasión y el aislamiento del individuo.
De hecho, las víctimas potenciales de las sectas son personas que atraviesan por un período de crisis emocional, dificultad económica, crisis afectiva y estado de ánimo depresivo. Estos sujetos son fácilmente manipulables y encuentran en el grupo la el consuelo y la ayuda que necesitan. Se inicia entonces el proceso de “lavado de cerebro”.
Mediante meticulosas técnicas de persuasión se crea un proceso paralelo de creación de vínculos de afinidad y dependencia respecto del grupo, y de ruptura de los lazos con la familia y el resto de la sociedad. Los principales reclamos suelen ser un nuevo y atractivo sistema de valores y creencias, y la existencia de un líder supremo autoproclamado.
Según estimaciones, en la actualidad existen entre 200 y 250 sectas en España que siguen en activo, pero hay una cifra aún más escalofriante: unos 6 millones de personas han estado en contacto en algún momento con sectas de forma directa o indirecta. Además, un 40% de la población podría estar en riesgo de ser captado por una secta.
Puesto que la captación se produce sobre personas que se encuentran en una situación de vulnerabilidad emocional, la crisis económica y la fractura social de los últimos años han sido un caldo de cultivo para el crecimiento de las sectas.
La mayoría de estos grupos se concentran en Valencia, Madrid y Barcelona: al ser núcleos urbanos con flujo de muchas personas favorece el movimiento y la implantación de los grupos. Las cifras que se barajan en España no distan mucho de la situación de otros países como Alemania, Italia o Francias, aunque estos países tienen una legislación específica para sectas.
En España no existe una legislación que regule este tipo de grupos, pues muchas veces quedan ocultos detrás de asociaciones religiosas y grupos terapéuticos. La mayoría de los delitos imputados a líderes de sectas son el tráfico de personas, el abuso de menores, daños psicológicos, extorsión y delitos contra la salud pública.
Desde una religión ovni que ve a la raza humana como una creación de ingeniería genética hasta la espeluznante Familia del Amor que predica el incesto, la pedofilia y la violación, algunas sectras siguen activas ofrecen una curiosa variedad de doctrinas.
“Filosofía, Cultura, Voluntariado” es el eslogan que encabeza la web de esta organización internacional fundada por el filósofo José Ángel Livraga en Argentina en 1957. Su principal mensaje es el siguiente: poniendo en práctica las enseñanzas de los pensadores clásicos se puede llegar a la fraternidad universal y el desarrollo de las capacidades individuales.
Aunque el planteamiento pueda parecer ideal, algunos ex miembros denunciaron agresivosmétodos de captación y abuso psicológico. Los expertos lo consideran una secta, por el secretismo que envuelve la organización y su estructura fuertemente jerarquizada, y su grupo en España ha levantado sospechas por encubrir ideología fascistas y antisemita.
Las grandes patas de la asociación son la celebración de conferencias y cursos filosóficos y esotéricos, y el voluntariado. Tras esos métodos de captación se encuentran peligrosos mensajes como la eliminación de los inadaptados en el nuevo futuro, una simbología fascista y estética paramilitar que incluyen saludos al líder.
Fue considerada por el Parlamento Europeo como una de las sectas más peligrosas.
Convertida en una de las religiones más controvertidas del mundo, la Cienciología lleva décadas de lucha abierta contra todo aquel que ose decir que se trata de una secta. Sin embargo, documentales como “Going Clear” dejan al descubierto prácticas irregulares como abusos psicológicos y extorsión.
Aunque fue creada en los años 50 en California, su popularidad aumentó con el ingreso en sus filas de celebridades como Tom Cruise y John Travolta. En España es considerada desde 2007 una Iglesia, que cuenta con una serie de programas humanitarios para la mejora social. Su gancho: llegar a la verdad a través del conocimiento de la persona.
Uno de los punto más polémicos que hace que muchos lo vean como una secta es que sus miembros van conociendo los detalles de su doctrina poco a poco y mediante el pago de altas cantidades de dinero. Eso les permite ir subiendo de rango en la organización hasta llegar al escalón supremo, donde tienen acceso a los documentos del líder.
En el citado documental se exponen los métodos de abuso psicológico que habría provocado por ejemplo el divorcio entre Tom Cruise y Nicole Kidman, o la reticencia de John Travolta de abandonar la iglesia por las amenazas de revelar detalles de su vida privada. La iglesia lo desmiente y denuncia a todo aquel que se atreva a hacer tal clase de acusaciones.
La Gnosis es, literalmente, la ciencia por excelencia y el conocimiento supremo, y es además el corazón de la doctrina de una de las sectas españolas más activas: cientos de miles de adeptos siguen el mensaje del Instituto Gnóstico de Antropología que sustituye la redención de Cristo por la redención individual mediante un sacrificio personal profundo.
Esta organización fue creada en 1954 en Colombia por un curandero que se hacía llamar Samael Aun Weor, y tras su muerte en 1977 sus conocimientos se extendieron por varios países, llegando también a España. Actualmente existen docenas de centros gnósticos en toda España, donde se realizan charlas y conferencias como método de captación.
Los conocimientos transmitidos por el “maestro” eran una mezcla de ocultismo, esoterismo e influencias filosóficas orientales cuyo auge en los últimos años ha multiplicado la adhesión a sus principios.
La doctrina principal divide al ser en personalidad, esencia y ego, siendo la esencia algo innato y la personalidad algo adquirido, de modo que el hombre desarrolla el ego y sus maldades a medida que crece. La psicología gnóstica busca la educación de esas tres partes para lograr la unidad del intelecto, el alma y los instintos. Se completa así la auto-realización del ser.
Los expertos denuncian prácticas de abusos físicos y psicológicos sobre los miembros de la asociación, así como extorsión y otros delitos. En un congreso gnóstico de 2015 en Santiago de Compostela murió asfixiado el bebé de una pareja que había asistido al evento, y recientemente se dio el caso del secuestro de la española Patricia Aguilar en Perú.
La iglesia gnóstica se ha desmarcado siempre de lo que considera malas praxis individuales.
Es seguramente la secta religiosa más conocida en España, con una larga implantación y una intensa actividad de proselitismo. Los Testigos de Jehová son conocidos por difundir su mensaje puerta a puerta, pues cada uno de sus miembros es visto como un profeta (testigo) cuya misión es trasladar el mensaje de Dios (Jehová) a los demás.
Oficialmente, se trata de una religión milenarista y restauracionista segregada del catolicismo por su negación de la Santa Trinidad. Fue fundada en 1881 por Charles Taze Russell como una variante moderna del protestantismo, pues predica el retorno al cristianismo primitivo y la lectura e interpretación individual de la Biblia, sin intermediarios.
Uno de los mensajes más importantes de su doctrina es el anuncio del fin del mundo, tras el cual solo unos cuantos podrán acceder al reino de los cielos. A diferencia del cristianismo, los Testigos de Jehová creen que la muerte es el fin de la existencia, pero cuando Dios resucite a los que se han ido, los adeptos se salvarán.
Mediante este mensaje, las congregaciones sirven como lugares de reunión y captación de miles de adeptos y voluntarios que financian la organización. Uno de los puntos más polémicos es su oposición a los avances científicos y su negación a someterse a tratamientos médicos como las transfusiones de sangre.
Además de que algunos de sus miembros se han visto envueltos en casos de abuso sexual infantil, esta organización es considerada una secta por sus prácticas consistentes en aislar a la persona de su medio social (se le exige que rompa con todo aquel que no forme parte de la comunidad) y su control mediante un liderazgo autocrático y coercitivo.
Cuando la esotérica se incorpora a la doctrina de una secta su sistema de creencias puede llegar a parecer extravagante, pero a veces adquiere una sorprendente capacidad de convicción. Es el caso de los Raelianos, una de las sectas españolas que convence a sus adeptos de que no estamos solos en el universo.
El maestro Rael reveló, en 1974, que la raza humana es una creación de ingeniería genética por obra de los dioses superiores, los Elohim. Estos dioses son extraterrestres pertenecientes a una civilización superior que han creado la Tierra mediante la ciencia.
Los Raelianos ven la homosexualidad como una circunstancia genética natural y son activistas LGTBI. Además, han apostado activamente por la clonación como un método de alcanzar la inmortalidad, y por la geniocracia como una forma de gobierno político ideal en la que los genios gobiernan las sociedades humanas.
La religión ovni o culto de los Raelianos sigue activa en España, pero cuenta solo con una decena de miembros. Aunque han sido acusados de pedofilia por sus concepciones laxas sobre la sexualidad, se han mostrado firmes en la lucha contra cualquier abuso sexual.
La Iglesia de los Santos de los Últimos Días es la denominación oficial de una religión más conocida como los mormones y cuyo proselitismo y jerarquía interna hacen que muchos la consideren como una secta. En el mundo tienen 14 millones de miembros, 47.000 de los cuales en España, donde tienen actividad desde 1969.
Sin embargo, otros muchos no consideran que los mormones sean una secta, pues no ocultan nada y solo son una escisión doctrinal del catolicismo. Como particularidades, creen que Dios estuvo en América, que María tuvo otros hijos después de Jesús, y que todos podemos llegar a ser alcanzar un tipo de divinidad.
Los mormones es un grupo religioso fundado en 1830 por Joseph Smith que ha desarrollado prácticas heterodoxas como la poligamia o el bautizo de los muertos. En la actualidad los mormones no practican la poligamia, pero les está prohibido fumar y beber, así como mantener relaciones sexuales antes del matrimonio.
Los miembros de la comunidad sufragan su mantenimiento con un 10% de su salario. Los nuevos miembros hacen apostolado durante uno o dos años por todo el mundo predicando su fe, y se considera que en España hay unos 200 misioneros. Son fácilmente reconocibles porque visten camisa blanca, corbata y una chapa identificadora.
La Familia Internacional o Familia del Amor es una secta que nace del movimiento hippie a finales de los sesenta y evoluciona hacia uno de los grupos religiosos más destructivos. Desde su inicio a través de las enseñanzas de David Brandt Berg, su mensaje gira en torno a la estrecha relación entre la religión y el sexo.
De hecho, los escándalos sexuales han salpicado a la organización y a su fundador desde su nacimiento, y sin ir más lejos sus propias hijas y nietas lo acusaron de abusos sexuales reiterados. Más tarde se reveló que el sexo era una de las principales armas de seducción que utilizaban las “misioneras” de la congregación para captar nuevos miembros.
En 1993 un 70% de los miembros de la Familia eran menores de edad, y la secta era sometida continuamente a denuncias por secuestro, abuso sexual y pedofilia.
La clave de la Familia del Amor (inicialmente llamada los Niños de Dios) eran las revelaciones apocalípticas de su gurú, y las normas establecidas en los más de 3.000 libretos que escribió, en las que aseguraba que a Dios le gusta el sexo porque es hermoso y que las prácticas sexuales son naturales y recomendables, incluyendo la pedofilia, el incesto y la violación.
Aunque muy minoritaria, la Familia sigue teniendo una comunidad en España, donde camuflan su mensaje en una apariencia de organización ecologista y humanitaria.
El lujo y el poder son los adjetivos que mejor describen una de las escisiones más inquietantes de la religión católica, y una de las sectas en España que siguen activas. La Iglesia del Palmar de Troya es una de las confesiones más bizarras que constituye, además de un nuevo código religioso, toda una estructura con sus iglesias y sus Papas.
Nace, de hecho, de una serie de apariciones marianas y éxtasis místicos cerca del Palmar de Troya, en Sevilla, donde en 1968 el vidente Clemente Domínguez funda una congregación religiosa. A partir de ahí se construye toda una retórica escatológica que afirma la llegada del Anticristo y el fin del mundo a partir de una serie de visiones apocalípticas.
A medida que sus creadores van difundiendo la iglesia palmariana por el mundo mediante una intensa actividad de proselitismo, ejercen una presión cada vez mayor sobre sus adeptos para la financiación de un auténtico Vaticano palmariano que acumula riquezas y lujo a través de donaciones externas. Pesa sobre ellos varias acusaciones de lavado de dinero.
Clemente Domínguez fue el primer Papa palmariano hasta su muerte, en 2005, y ha sido sucedido por tres más. Desde el principio, el Papa palmariano excomulgó al Papa romano y consideró el Vaticano como “la gran ramera” y precursor del Anticristo. Su base de operaciones es la basílica del Palmar de Troya, una lujosa catedral de 3.500 metros cuadrados.
La doctrina palmariana es ultraconservadora y contempla preceptos rígidos que obliga a la mujer a llevar velo y le prohíbe llevar pantalones, y exige a los fieles evitar ver la televisión, ir al cine o relacionarse con personas de otros cultos.
La particularidad de esta secta conocida como el Opus Dei es que pertenece a la propia iglesia católica, es decir, que no nace de una escisión. Sin embargo, su secretismo y la rigidez de sus preceptos ultraconservadores la han puesto en el punto de mira de las críticas y muchos lo consideran una secta a todos los efectos.
Sus orígenes se remontan a 1928, cuando José María Escrivá de Balaguer, sacerdote español canonizado en 2002 por el Papa Juan Pablo II, fundó la prelatura de la Santa Cruz y Opus Dei. En 1950 la Santa Sede la reconoció como cuerpo eclesiástico autónomo dentro de la Iglesia Católica, y según datos de la propia prelatura cuenta con 2.083 sacerdotes y 92.600 miembros.
Su misión, oficialmente, es fomentar la conciencia de la llamada universal a la santidad mediante la observación de las normas en la vida ordinaria, que incluyen la santificación del trabajo, la oración y la mortificación, la caridad y el apostolado y la renuncia a la doble vida.
Aunque reciben el apoyo de la Iglesia oficial, ha sido criticada por su agresiva captación de adolescentes, especialmente a través de sus instituciones escolares, sus restricciones derivadas del integrismo ideológico, el daño psicológico que causa en muchas personas, los castigos físicos y el control autoritario, entre otros.
Tras un largo periplo y varias acusaciones, en 2001 los 200 miembros en España de la religión Moon fundada en Corea del Sur en 1954 consiguieron que el Tribunal Constitucional amparar su derecho a constituirse como iglesia. Considerados de facto como una iglesia más, los Moon cargan sobre sus espaldas el estigma de sectarios, fanáticos y autoexcluidos.
La llamada Iglesia de la Unificación fue creada por Sun Myung Moon en Seúl, pero su mayor congregación está en Estados Unidos con cerca de 2 millones de miembros. La clave de su doctrina es que Jesús no pudo completar su misión, y Dios convirtió a Sun Myung Moon en un nuevo Mesías encargado de completar la obra divina.
En 1957 Dios reveló la misión al profeta y este la plasmó en “El principio divino”, texto sagrado de los moonies, que mezcla la tradición cristiana con budismo, taoísmo y confucianismo. Lo más polémico de su doctrina fue la declaración de que Jesucristo no era Dios, sino un hombre bueno que fracasó en su misión, y por eso la cruz es vista como un símbolo de derrota.
Como sucede con otras sectas religiosas, la Iglesia de la Unificación consiguió generosas aportaciones económicas con las que consiguió crear toda una red de proyectos, empresas, medios de comunicación y centros desde los que propaga su mensaje. Además, su líder fue acusado de tráfico de armas.